Huahine es el lugar perfecto para aquél que busca la tranquilidad en su viaje a la polinesia francesa.
Huahine es un concentrado de belleza, naturaleza salvaje y seductora.
Adornada con playas vírgenes de arena blanca y bahías desiertas, montes frondosos y una laguna mágica de azul luminoso.
El ambiente místico reina en la isla, presente no sólo en su riqueza arqueológica, sino también en su lento ritmo de vida.
Huahine nos muestra su esencia natural perfecta para actividades acuáticas, como paseos en la laguna, surf, pesca, cruceros y exploración de su llamativa y fascinante fauna y flora marina que no olvidaremos en el viajes a polinesia francesa.